martes, 31 de agosto de 2010

ACERCA DEL FUTURO MEDIATO DEL CENTRO UNIVERSITARIO DE OCCIDENTE

Ensayo publicado en la Revista Actualidad No. 7 del mes de julio de 2010 del Departamento de Investigaciones Económicas y Sociales -DIES- del Centro Universitario de Occidente -CUNOC-

PUNTOS DE INTERÉS


En el presente ensayo, se hace una breve exposición de algunas ideas sobre los aspectos que deben atenderse en el CUNOC, especialmente, a partir de 2011 en que se ha inicia una nueva administración.

El aspecto central, es que deben atenderse los problemas del momento, pero, deben tomarse decisiones que incidan en el futuro mediato y de largo plazo. Solamente así, se podrá desarrollar este centro y retribuir mejor a una sociedad de contribuyentes que sostiene a la universidad estatal.

Antecedentes:


En agosto de 2010 se llevará a cabo la elección de Director General del Centro Universitario de Occidente por lo que a partir de enero de 2011, iniciará un nuevo período administrativo. Nuevamente, hay expectativas entorno a la dirección que tomará la institución en los próximos cuatro años. Ello es comprensible, porque el CUNOC sigue siendo el centro de estudios universitarios más importante del interior del país, no sólo por su tamaño y número de estudiantes, sino por su historia, ámbito de influencia y la diversidad de formas de pensamiento que allí siguen convergiendo.

Es obvio que en ese centro universitario, existen problemas ilimitados que merecen atención, pero, ante la limitada disponibilidad de recursos, deben atenderse los que se consideren prioritarios. Uno de los más importantes que deberán enfrentar las nuevas autoridades, es continuar con el rescate de la imagen de la institución, misma que se ha visto seriamente empañada ante la sociedad, por la desnaturalización de la huelga de dolores. Ese problema, debe ser uno de los que más deben atenderse y reflexionarse en los diferentes niveles de mando, juntamente con profesores, estudiantes, organizaciones de la sociedad civil y fuerzas de seguridad para buscarle una solución definitiva. Muy poco se hizo al respecto, en las últimas administraciones.

En esa tarea, el nuevo Director General y su equipo de trabajo, deberán demostrar su liderazgo y capacidad de negociación para lograr los cambios que demanda la comunidad universitaria y la sociedad en general.

Hay otros problemas que se han ido consolidando en la estructura del CUNOC y que deben enfrentarse con decisión. Estos son: el bajo nivel académico y la baja calidad en la formación profesional. Esos son temas sumamente claves para que el CUNOC y sus egresados sean más competitivos y enfrenten mejor fenómenos derivados de la globalización, liberación comercial y cambio climático y además, contribuir para que la sociedad sea más competitiva y justa. No hay que olvidar que el fin fundamental de la USAC plasmado en el Artículo 2o., de su Ley Orgánica es: “elevar el nivel espiritual de los habitantes de la República, conservando, promoviendo y difundiendo la cultura y el saber científico.” Ello, será posible para el CUNOC, si mejora sensiblemente su proceso administrativo, la docencia y los procesos de investigación y extensión.

Es así, que el director general juntamente con su equipo, bajo ciertos principios como el de probidad, humildad, racionalidad, honestidad y respeto a las normas jurídicas, deberá esforzarse por integrar a la comunidad universitaria con un propósito común: recuperar el prestigio e imagen del CUNOC.

Será importante, ser pragmáticos y reconocer los avances de administraciones anteriores para dar continuidad a los proyectos iniciados y no cometer así, el error de partir de cero.

Los discursos deberán quedar en el pasado y solamente trabajar duro para dar cumplimiento a los ofrecimientos de campaña y así, enfrentar y resolver los principales problemas de esta casa de estudios sobre la base de la eficiencia y eficacia. Es tiempo que la sociedad perciba que en esa institución sus impuestos se están utilizando óptimamente.


Lo prioritario:


Sigue siendo común, escuchar comentarios, especialmente, de profesores y profesionales egresados del CUNOC y otros actores sociales, en los que se manifiesta la preocupación que existe por el futuro de esa casa de estudios superiores. Ello es entendible, porque dicho Centro, se sostiene con impuestos y porque su oferta de estudios es la más accesible para llevar a cabo estudios terciarios.

Personalmente, sigo creyendo que se debe continuar trabajando en la recuperación de la imagen y prestigio de la institución, así como, en elevar la calidad del nivel profesional y académico. ¿Cómo hacerlo? Definitivamente, no es una tarea sencilla, todo lo contrario, implica un arduo y abundante trabajo en equipo para combatir el acomodamiento, letargo, mediocridad, indiferencia y la anarquía que hoy sojuzgan esa institución. No cambiar este esquema, significará continuar experimentando un bajo índice de efectividad en el cumplimiento de los fines y objetivos plasmados en su Reglamento y por supuesto, continuarán el caos y los desenfrenos.

No hay excusa alguna, para seguir permitiendo que personas egoístas e ineptas con intereses espurios, sigan destruyendo una institución que es propiedad del pueblo que la sostiene con sus tributos.

Es así, que quien gane la elección de Director General, deberá trabajar incansablemente hasta obtener resultados contundentes en cuanto al rescate del CUNOC de malos elementos que lo siguen destruyendo y también de muchos “buenos elementos” que no hacen algo por evitarlo.

Hay consenso –y no de ahora-, en que deben ejecutarse acciones tendientes a la recuperación del CUNOC de las actividades delictivas que se llevan a cabo durante la huelga de dolores. Dichas acciones, deben involucrar además de la comunidad universitaria, otras instituciones como la PNC, el Ministerio Público, la PDH, empresas y Gobernación. Ese problema, debe tratarse durante todo el año y no esperar hasta la época de cuaresma para enfrentarlo con acciones situacionales con un bajo grado de impacto.

Con respecto a los problemas nacionales, regionales y locales, el CUNOC lleva años sin hacer pronunciamientos que puedan servir de base para orientar a la población. Por Ej. ¿Cuál es la posición de esta institución con respecto a la inseguridad ciudadana y violencia en el país? ¿cuál es su posición entorno al proceso de elección del Fiscal General de la República? ¿Qué posición tiene con respecto a la gestión del gobierno municipal? ¿cómo se pronuncia con respecto a las iniciativas de ley y los decretos del Congreso de la República? ¿la crisis económica? Etc. La respuesta, es que nadie lo sabe y parece que allí a nadie le interesa analizar, comentar o simplemente opinar la problemática coyuntural y estructural del país. Menos aún, hacer algo de prospectiva, es decir, sobre bases científicas pronosticar el futuro del país. Ello, resulta superlativamente contradictorio, porque es un Centro que cuenta con un staff de profesores de diversas disciplinas, que como especialistas deberían fomentar el debate de los problemas nacionales e internacionales de mayor relevancia académica. Ese marasmo, debe terminar porque a lo externo podría interpretarse como estar de acuerdo con todo y que el CUNOC es solamente otro concurrente.

Ha sido común, que fuera de las instalaciones del Centro Universitario de Occidente, se conozcan las cosas malas que allí suceden, pero, ¿y qué de las cosas buenas que también suceden? Casi nadie las conoce, porque no ha habido una buena comunicación hacia la comunidad universitaria y sociedad en general. Informar sobre los avances y buenas acciones, es sumamente importante para que todos como ciudadanos también sepamos que en ese Centro hay muchos cosas positivas que a la larga pueden pesar más que las negativas. Mejorar la comunicación con la sociedad, es fundamental para que se conozca la verdadera imagen del CUNOC y no solamente los aspectos negativos que la empañan.

Una de las mejores riquezas del CUNOC, es la convergencia de diversas ideologías, posiciones filosóficas y políticas, que lo hace un terreno fértil para una amplia discusión académica sobre la problemática nacional y realizar infinidad de estudios para generar propuestas de solución. Sin embargo, sigue siendo muy notable el divisionismo que existe entre los diferentes grupos de interés que allí se desenvuelven y que a su vez han limitado de una u otra forma el desarrollo de la institución. Las próximas administraciones del Centro, deberán trabajar arduamente para integrar a esos grupos respetando su forma de pensar y con un propósito común, que es hacer grande esa casa de estudios y devolverle a la sociedad beneficios tangibles como una retribución a los impuestos que paga para su sostenimiento.

El contexto:

Ya hace un buen rato que nos encontramos inmersos en la globalización y liberación comercial, y junto a ello, sintiendo los efectos de la crisis mundial, especialmente, lo derivado de la recesión económica, el calentamiento global, el encarecimiento del petróleo y sus derivados. Vivir en ese contexto socioeconómico y ambiental, significa, que ya no es permisible seguir egresando profesionales que no reúnan un perfil estándar en cuanto a competitividad. Hoy, la competencia todavía se da en su mayoría con egresados de las otras universidades del país, pero, es mas que seguro, que paulatinamente en el futuro, será con profesionales de universidades extranjeras. ¿Estamos preparando a nuestros futuros profesionales para ese tipo de competencia? Creo, que hace falta mucho para eso. Por ejemplo, nuestros egresados, la gran mayoría no cuentan como instrumento de trabajo el dominio de otro idioma, como podría ser el inglés que es el de mayor uso en el mundo. Basta observar en la actualidad las ofertas de puestos de trabajo, para darse cuenta de los requerimientos de las empresas, donde los más comunes son la experiencia, la especialización y dominio del inglés.

En un mundo que sigue siendo impulsado por la competitividad, ningún país o institución puede abstraerse de ese contexto, porque su permanencia se tornaría muy difícil o quizás imposible. Resulta fundamental entonces, elevar la calidad en la preparación profesional y académica para que enfrentemos la globalización con mayor eficiencia y competitividad. Ello significa, que todo lo que produzcamos tenga demanda y sea útil para satisfacer necesidades.

Si para universidades como el CUNOC, la producción mas importante son los profesionales que gradúa, es esencial que esos out puts tengan demanda y sirvan para satisfacer las necesidades de sus consumidores. De lo contrario, podrían tener la suerte de los productos perecederos. Es por esa razón, que adicionalmente a la cantidad, debe importar la calidad de la producción, porque solamente así, se podrá enfrentar cualquier competencia que venga. Como que hay que construir entonces, una función de producción, para establecer cuáles son los determinantes para generar un profesional de alta calidad.

Otro aspecto, que debería ser parte del quehacer del CUNOC, es la formación de empresarios. Eso, no debe ser una tarea exclusiva de las universidades privadas. Eso, quiere decir que no debe dedicarse únicamente a la preparación de fuerza de trabajo calificada para las instituciones del Estado, empresas privadas, ONG, etc. Nuestra universidad, contribuiría mucho más con el desarrollo nacional, si también enfocara sus esfuerzos para formar futuros empresarios y calificar más a los ya existentes. Hay muchos ejemplos de egresados del CUNOC, que hoy son empresarios exitosos. En ese sentido, creo firmemente que si alguien encuentra un empleo para el que fue preparado, resuelve su problema y probablemente el de su familia, pero, si alguien forma una empresa y la hace crecer, no solamente resuelve su problema económico, sino el de las personas que directa e indirectamente se benefician con los puestos de trabajo, la producción, rentas y los tributos que genera.

Nuevas empresas contribuyen a generar más riqueza y por lo tanto a aumentar el producto interno bruto. Si ello es sostenible en el tiempo y a tasas significativas, se puede pensar en términos realistas en disminuir la pobreza del país. Nos guste o no, el sistema capitalista es el que sigue dominando en el mundo y así seguirá por muchos años, entonces, más beneficio obtendrían los futuros profesionales y país en general, si se les formara para que tuvieran como alternativa adicional constituirse en buenos empresarios y hacer inversiones productivas.

Por supuesto, todo lo que se haga para mejorar la calidad de la preparación profesional, debe hacerse en función de los fines y objetivos de la USAC como Universidad del Estado.

Tampoco, debe olvidarse que la mejora en el producto final, debe implicar cambios en el proceso de formación, lo que implica cambiar el sistema escolástico que todavía prevalece en la docencia, por uno que sea más adecuado al contexto actual. Es por ello, que es un reto para las futuras administraciones del CUNOC, llevar a cabo acciones para elevar la calidad del nivel académico, mismo que en la actualidad no responde a las necesidades del cambiante contexto nacional e internacional.

Una de las razones, de que el quehacer académico se encuentre en un nivel poco aceptable, es el divorcio que aún prevalece entre la docencia e investigación y entre el CUNOC y las instituciones publicas y privadas. En ninguna universidad reconocida, es aceptable que la docencia y la investigación se realicen en forma separada. En el CUNOC, es imperativo conjugar esos dos procesos de tal manera que se deje ya el papel de ser únicamente consumidores de conocimiento generado en otros contextos y se empiece a adoptar el papel de productor. Para ese propósito, es esencial estimular y apoyar a los profesores e inducir a los estudiantes para hacer investigación que sirva para propiciar no solo su aprendizaje teórico, sino de la problemática nacional. Introducirse en el apasionante mundo de la investigación, significa formarse un marco teórico y conceptual, identificar problemas susceptibles de ser investigados, hacer consultas con especialistas, empaparse en métodos y técnicas de investigación, hacer uso de programas de computación. En fin, una docencia vinculada a la investigación haría que el proceso enseñanza aprendizaje fuera integral y efectivo para la formación de los nuevos profesionales, además, se estaría desarrollando también la educación superior. Todo ello, vinculado con otros organismos públicos y privados. Se podría elevar entonces, la calidad del staff de profesores y hasta se formaría una planta de capital intelectual.

Dos herramientas básicas con las que se cuenta a partir de este año, son las Líneas de Investigación, así como, el Sistema de Investigación que incluye un Consejo y una Dirección Investigación del CUNOC y sus correspondientes centros, institutos, coordinaciones y departamentos de investigación de las diferentes divisiones académicas. Utilizándolas correctamente pueden ayudar a impulsar como nunca antes, procesos de investigación y acercarlos cada vez más a la docencia.

Lo que hay que hacer:

Lograr la integración de la docencia y la investigación seria magnifico para recuperar el prestigio académico de la institución. Por supuesto, no es nada fácil, ya que para todo se requiere de recursos frescos y es lo que más escasea. Sin embargo, si hay claridad en la importancia que tiene ese reto y se tiene la voluntad política de hacer lo necesario, se puede lograr. Se puede empezar por asignar un renglón presupuestario exclusivo para realizar investigaciones, pero, se debe ir más lejos y eso significa obtener fondos necesarios para que el CUNOC se convierta en un centro de investigaciones, como dice su Reglamento.

No debe seguirse dependiendo solo de recursos propios, sino de otros que provengan de la venta de los resultados de los estudios o por realizar investigaciones para el sector privado por ejemplo.

Si se le da vida a la investigación, se mejorara no solamente la docencia, sino también la extensión universitaria y, lo más importante aún: habrá vida académica.

No debe olvidarse que la Universidad de San Carlos, no es el mejor ejemplo de lo que es descentralización y desconcentración administrativa. Prueba de ello, es la mórbida dependencia que tiene el CUNOC de la administración central, especialmente en cuanto a presupuesto y recursos humanos. Para obtener algo, hay que atravesar un calvario rogando, suplicando, chaqueteando y hasta hacer culto a burócratas que piensan que hacen un favor, cuando realmente es su obligación. Es por esa razón, que debe tomarse en serio la idea de que así como la USAC recibe una asignación del cinco por ciento del presupuesto general de ingresos del Estado, el CUNOC como segunda unidad más importante, debe luchar por una asignación porcentual del presupuesto de la USAC. Como la USAC recibe el 5% de los ingresos ordinarios del presupuesto del Estado, entonces, el CUNOC debería obtener por ejemplo un 10%, de esa asignación constitucional. Así, conforme aumente el presupuesto de la USAC, también aumentaría el presupuesto del CUNOC. De esa forma, se podría planificar mejor para el mediano y largo plazo. Por supuesto, que esa idea va a resultar descabellada para las autoridades centrales, cuya mentalidad es centralista y de concentración del poder. Para ese alcance, es importante tomar en cuenta otros aspectos. Por ejemplo, procurar que el CUNOC se transforme en una facultad y si es posible proponer reformas al Artículo 82 de la Constitución Política, el Artículo 13 de su Ley Órganica y el Artículo 10 de sus Estatutos, de tal manera que haya representantes de este Centro ante el Consejo Superior Universitario, máxima autoridad de la USAC donde se toman sus decisiones más importantes como la distribución de los recursos.

Mientras tanto, el nuevo Director General del CUNOC, como parte de sus deberes y atribuciones, debería de pedir al Rector de la USAC que sobre la base del inciso f) del Artículo 19 del Reglamento del CUNOC se le convoque a las sesiones del Consejo Superior Universitario, donde con voz pero sin voto, podría exigir por lo menos un mejor tratamiento para nuestro Centro Universitario.

No es permisible seguir sin representación ante ese cuerpo colegiado. Hay facultades que tienen menos de mil estudiantes y están representados, mientras que el CUNOC tiene más de diez mil estudiantes y no tiene representación. Así, como los decanos de las facultades son miembros del Consejo Superior Universitario, también debería serlo el Director General del CUNOC, para que también participe en la toma de las decisiones importantes de la USAC en general y de su centro en particular. Siendo parte de la toma de decisiones, se pueden resolver mejor los problemas y se deja de una vez por todas, la dependencia de la buena o mala voluntad de las autoridades centrales, especialmente, de quien sea el Rector de turno.


Conclusión:

Independientemente, quien sea el Director General del CUNOC de 2011 a 2014, los profesores, estudiantes, egresados y sociedad en general, esperamos que se dedique a tiempo completo a trabajar por el desarrollo de esa casa de estudios superiores y que no sea otro que no hizo nada trascendental, ni digno de recordarse.

El Cunoc y su próxim@ director

Columna de opinión publicada en el Trisemanario elQuetzalteco el 26-08-2010.

El próximo lunes 30 será la elección de director general del Cunoc. Ello reviste de singular importancia, por ser el principal centro universitario de la USAC fuera de la ciudad capital. Durante sus 40 años de vida, el Cunoc ha proporcionado la oportunidad de estudios universitarios a un gran número de personas a un costo bajísimo, ha realizado tareas de extensión e investigación que de una u otra manera han incidido en el desarrollo local y regional. Es así que, este evento electoral resulta importante por tratarse de una institución del Estado que se financia con impuestos de todos los guatemaltecos.


Los profesores, estudiantes y egresados del Cunoc tienen una responsabilidad moral e histórica en esta elección, porque quien resulte electo deberá hacer cambios y continuar con la solución de problemas pendientes, tales como recuperar su prestigio, reencausar la Huelga de Dolores, elevar el nivel académico, entre otros. Por supuesto, una vez electo el nuevo director, debe iniciar el proceso en el que se le exija el cumplimiento de su propuesta de trabajo y no dejarlo solo como ha sucedido, sin pedirle cuentas.

Hay tres candidatos, cada uno con su propuesta de trabajo, misma que no debe ser confundida con un plan. Las propuestas son un instrumento político lleno de buenas intenciones para ganar adeptos. Quien gane deberá elaborar un plan en el que proponga objetivos viables y factibles que beneficien a toda la comunidad universitaria en lo particular y sociedad en general. Por ello, es esencial evaluar no sólo la propuesta de cada candidato, sino evidenciar quién tiene mejor relación con las autoridades centrales de la Usac, debido a la elevada dependencia que tiene el Cunoc de las disposiciones del Consejo Superior Universitario y la Rectoría. La historia ha demostrado que cuando mejor le ha ido al Cunoc es porque su director ha tenido buena relación en la Rectoría, y también ha sido evidente, que cuando la relación fue mala, pues no se ha logrado nada importante. Votemos entonces, por la persona que más beneficios pueda representar para el CUNOC.